Los principios son de la persona física o moral, se van consolidando con el tiempo y la propia convicción, y se integran y conforman con aquellos valores que para ella constituyen la base moral que no está sujeta a negociación y por lo tanto hay que respetar, son formulas o máximas de actuación, en base a normas auto impuestas o acordadas, que obligan absolutamente. La autoridad moral, es la validez que da a la persona la autenticidad y precisamente, el recto apego a sus principios en su actuación con los demás y consigo misma.

La ética es la parte de la filosofía que estudia la conducta del comportamiento humano en la tendencia de la voluntad a obligarse a realizar el bien, esto es la conducta ética como la parte práctica del pensamiento filosófico. Así como la sicología se encarga del estudio científico de la conducta, la ética se encarga del estudio moral de la conducta. Históricamente y por lo general existen dos concepciones filosóficas de la ética, diferentes pero no excluyentes: La primera es la concepción idealista, platónica, el fin al que debe dirigirse la conducta. Y la segunda es en función del móvil de las fuerzas que influyen para definir las causas y motivos de la conducta. El bien como objeto de la voluntad, condicionado por los acicates y alicientes que por lo general mueven el comportamiento humano.

En esta forma podemos considerar a la ética como un verdadero arte de la conducta en la realización del bien.

El presente código regulará el comportamiento ético de todos los miembros de la FMFEO, tanto en lo individual en su actividad profesional, como a los diferentes entes institucionales en su actuación dentro de los órganos de Educativos a los que cada uno representa. El Respeto a los demás y a su dignidad como persona; será un imperativo ético permanente, para todos los sujetos al código. El valor del respeto en el ejercicio profesional y en las relaciones en general, comienza por respetar la dignidad de la persona y se manifiesta a través de la ética profesional en las relaciones de trabajo y actividad, tanto internas como externas, poniendo especial atención a la relación con los demás, especialmente con el cliente o a quienes servimos, y particularmente con el equipo de colaboradores Cuando profesionalmente existen opiniones o posturas serias, diferentes a las nuestras, merecen respeto y consideración, aunque no nos satisfagan. Dado el caso, deberemos exponer debidamente fundamentados nuestros argumentos y defender enérgicamente pero con prudencia, nuestra postura profesional y personal sin ofender a otros. En las negociaciones es premisa fundamental el respeto reciproco entre las partes, teniendo siempre presente que una buena negociación es aquella en donde ambas partes quedan satisfechas, solo así ésta, podrá ser efectiva y duradera. El respeto que es válido para cada persona es válido y obligado para los demás. Respeto a la inteligencia; respeto a su integridad espiritual y corporal; respeto a su libertad; respeto a su ámbito íntimo y personal.

El valor de la responsabilidad en la ética profesional comienza desde la preparación misma de la persona con el conocimiento necesario, las aptitudes y capacidad suficientes para la realización

de las tareas encomendadas, hasta el logro de la atinada gestión y mejor esfuerzo en la realización de la encomienda, tratando siempre de lograr resultados a nivel de excelencia. La responsabilidad es uno de los valores éticos fundamentales.

Todos los sujetos al código, tienen la obligación no solo de hacer bien las cosas bajo su responsabilidad, sino de hacerlas lo mejor posible, teniendo como meta el logro del Valor de la excelencia. El no tratar de hacerlo en esta forma, implica una falta de ética. Ligado al valor de la responsabilidad está el valor de la excelencia en el actuar profesional, en cierta forma el actuar con seriedad, demanda que las cosas se hagan lo mejor posible teniendo como meta la excelencia. Cuando la realización del valor de la excelencia está presente en nuestras intenciones a la hora de la realización de nuestras responsabilidades; estamos cumpliendo un imperativo ético, toda vez que el logro de la excelencia lo es en toda actividad profesional.

Los sujetos a este código, tienen la obligación de ser honestos en cada uno de sus actos bajo cualquier circunstancia. La realización del Valor de la Honradez, obliga al manejo escrupuloso de los recursos que les son encomendados a los sujetos al código, y a utilizarlos en la forma más productiva posible, a rendir cuentas claras fuera de toda duda. Y a respetar escrupulosamente las propiedades y el patrimonio los demás. Y a reconocer las propias limitaciones para no crear falsas expectativas.

El principio de legalidad, que establece la primacía de la ley sobre la voluntad de las personas, debe prevalecer como un principio fundamental en todas nuestras relaciones. No todo lo que es legal es justo pero mientras exista la ley hay que cumplirla, muchas veces lo que debemos hacer es cambiar la ley, sobre todo aquella que fue hecha a la medida de intereses particulares. En la actividad gremial y el ejercicio profesional, es de la mayor importancia observar escrupulosamente el cumplimiento de las disposiciones legales, para protección de todas las partes.

La realización del Valor de la Lealtad es un imperativo ético, pero además es indispensable para la solidez de toda organización. Es la lealtad lo que le da cohesión interna a toda organización como la FMFEO, ésta debe efectuarse entre la organización y sus miembros como entre los miembros mismos en forma recíproca, porque para que se dé la lealtad, siempre debe ser en ambos sentidos.

Los Cirujanos Dentistas que conforman a la FMFEO tienen la obligación de prestar atención y servicio a la comunidad basado en las necesidades de salud de las personas y familias como parte integrante y calificada de los programas de prevención, protección, recuperación y rehabilitación de la salud, dando especial énfasis a la educación individual y de grupo y a estimular la participación activa de la comunidad en la solución de los problemas que la afectan.

Los principios que fundamentan a la Odontología obligan a rechazar cualquier tipo de discriminación a individuos, familias o grupos en relación con la atención que presta

Todos los sujetos al código se obligan a realizar el valor de la disciplina como forma de conducta y comportamiento. La apreciación y realización del valor de la disciplina, ha sido característica de las culturas que han trascendido en la historia de la humanidad. La disciplina implica sacrificio, esfuerzo, estoicismo y un afán indeclinable de logro y de respeto. La disciplina implica también obediencia y observancia estricta de los acuerdos y las normas establecidas. El revelarse o desconocer un acuerdo o una disposición tomada democráticamente por la mayoría de acuerdo a las leyes establecidas; es una falta de ética.

Coartar el Valor de la libertad a los demás, éticamente es inaceptable, sobre todo cuando se trata de elegir libremente a quienes nos habrán de gobernar o dirigir. Para que se dé el valor de la democracia, es necesaria la plena libertad para poder decidir después de haber ejercido el análisis crítico sin presión de ningún tipo, entre las diferentes opciones. La FMFEO presta sus servicios al margen de cualquier tendencia xenofóbica, racial, elitista, sexista, orientación sexual, religiosa o política.

Faltas y Sanciones. Tratándose de controversias sobre las faltas al presente Código de ética, incluyendo algunas que no hayan quedado suficientemente explicitas en él, tanto internas o como externas; en la FMFEO, se deberá recurrir a las instancias internas de la propia Federación Mexicana de Facultades y Escuelas de Odontología.